Al igual que otras 100 millones de personas, veremos el Super Bowl LII el domingo en el US Bank Stadium de Minneapolis.
Dejando a un lado el orgullo local, Clearfield tiene aún más "piel en el juego" (como dicen) porque administramos y protegemos toda la fibra en la que se ejecuta el tráfico de datos de banda ancha móvil de US Bank Stadium. Por lo tanto, tenemos un gran interés en garantizar que nuestros invitados al Super Bowl tengan una buena experiencia.
Nuestro trabajo es respaldar la infraestructura de fibra que impulsará las necesidades de alta tecnología de todos los fanáticos de los New England Patriots y los Philadelphia Eagles que llegan a nuestro estadio. El credo de Clearfield es "fibra hasta cualquier lugar", ya que brindamos acceso de banda ancha incluso a las partes más complicadas del mundo. Nuestras plataformas de fibra óptica probadas en campo conectan el sistema de antena distribuida (DAS) para potenciar las señales LTE y aumentar la capacidad inalámbrica en situaciones de uso denso... como estadios de fútbol. (¿Se imagina una situación de mayor densidad que la de 65 000 fanáticos con teléfonos inteligentes?) Incluso antes de que lleguen, los sensores identificarán la mejor ruta a seguir y el lugar para estacionar. Una vez dentro, los invitados escanearán sus boletos, se tomarán selfies, harán innumerables publicaciones en las redes sociales y consumirán niveles inimaginables de datos.
Pero tenemos esto. Clearfield está acostumbrado a estar en el centro para hacer posibles estas conexiones.
Y con esos más de 100 millones de ojos sobre nosotros el día del juego, realmente no hay presión en absoluto.